¿Qué es la encefalitis del perro viejo? Una secuela neurológica del moquillo canino
Esta enfermedad crónica suele pasar desapercibida en sus etapas iniciales, pero una vez avanza, afecta severamente la calidad de vida del perro, provocando alteraciones motoras, sensoriales y cognitivas. Entender qué es, cómo se manifiesta y qué opciones existen puede marcar la diferencia en la vida de un perro sobreviviente de moquillo.
Algunas batallas no terminan cuando parecen haber acabado. El moquillo canino, incluso tras haber sido superado clínicamente, puede dejar secuelas que aparecen mucho tiempo después. Una de las más enigmáticas y difíciles de diagnosticar es la encefalitis del perro viejo, una condición neurológica progresiva que puede surgir meses o incluso años después de la infección original.
Información importante
¿En qué consiste la encefalitis del perro viejo?
La encefalitis del perro viejo es una inflamación del sistema nervioso central asociada a una infección pasada por el virus del moquillo canino. A diferencia de los síntomas agudos que aparecen durante la enfermedad activa, esta condición se presenta tiempo después de la recuperación, cuando el virus ya no está presente en sangre, pero ha dejado una huella persistente en el cerebro.
Esta forma de encefalitis es progresiva, lo que significa que los síntomas tienden a empeorar con el tiempo. Afecta principalmente a perros adultos o mayores que contrajeron moquillo en su juventud, a menudo sin diagnóstico confirmado.
Síntomas que deben generar sospecha
Los primeros signos suelen ser sutiles: temblores esporádicos, descoordinación leve o movimientos en círculo. Con el paso de las semanas o meses, pueden aparecer síntomas más evidentes como:
- Mioclono constante, incluso en reposo
- Convulsiones intermitentes o recurrentes
- Ataxia (pérdida de coordinación)
- Cambios de comportamiento o alteraciones cognitivas
- Hipersensibilidad al sonido o al tacto
- Pérdida de control de esfínteres
- Parálisis parcial o progresiva
Estos signos suelen confundirse con problemas de la edad o con trastornos neurológicos degenerativos, lo que retrasa el diagnóstico y limita las opciones terapéuticas.
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Diagnóstico y pruebas recomendadas
El diagnóstico de encefalitis del perro viejo es clínico y de exclusión. No existe una prueba única para confirmarla. El veterinario suele considerar el historial de moquillo, los síntomas actuales, la progresión en el tiempo y descartar otras causas neurológicas mediante:
- Análisis de líquido cefalorraquídeo (LCR)
- Pruebas serológicas comparativas (LCR vs sangre)
- Resonancia magnética o tomografía computarizada
- PCR si hay sospecha de reactivación viral
En muchos casos, se detecta una cantidad elevada de anticuerpos en el LCR en comparación con la sangre periférica, lo que sugiere una respuesta inmunitaria localizada en el sistema nervioso.
¿Tiene tratamiento? ¿Cuál es el pronóstico?
Lamentablemente, no existe un tratamiento curativo. La encefalitis del perro viejo es una condición degenerativa y progresiva. Sin embargo, algunos síntomas pueden controlarse o ralentizarse con:
- Anticonvulsivos (para las crisis)
- Antiinflamatorios esteroides (para reducir la inflamación neurológica)
- Fisioterapia o terapias de apoyo
- Ajustes en la rutina diaria y en el entorno del perro
El pronóstico varía según la velocidad de progresión y la respuesta a los tratamientos paliativos. Algunos perros logran mantener una calidad de vida aceptable por años; otros pueden deteriorarse rápidamente, llegando a requerir la consideración de eutanasia humanitaria en fases avanzadas.
¿Se puede prevenir esta forma de encefalitis?
La única manera real de prevenirla es evitando la infección por moquillo en primer lugar. Una vacunación completa, realizada con las dosis y refuerzos adecuados, reduce de forma drástica la probabilidad de que el virus llegue al sistema nervioso.
También es importante actuar rápido ante cualquier signo de moquillo activo, ya que cuanto antes se inicie el tratamiento, menor es el riesgo de secuelas a largo plazo.
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Preguntas frecuentes sobre la encefalitis del perro viejo
¿Puede aparecer años después del moquillo?
Sí. Es justamente una de sus características: los síntomas pueden surgir mucho después de la infección original.
¿Hay alguna forma de curarla?
No. Solo pueden controlarse ciertos síntomas, pero no hay cura definitiva.
¿Afecta la esperanza de vida del perro?
Depende del caso. Algunos viven años con buena calidad de vida, otros requieren decisiones médicas difíciles en fases avanzadas.
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